Ertzaintza y policías municipales realizarán 10.000 controles hasta el día de Reyes para detectar conductores borrachos o afectados por estupefacientes
EL PELIGRO
468 automovilistas han provocado accidentes de tráfico desde enero en Euskadi por conducir bajo la influencia de bebidas alcohólicas o sustancias estupefacientes. El año pasado, la Ertzaintza tramitó 5.096 denuncias por este motivo.
Las Navidades están a la vuelta de la esquina y con ellas llegarán los excesos. Comidas de empresa y familiares, cenas con los amigos y cotillones donde las bebidas alcohólicas no faltarán e, incluso, se convertirán en el acicate de las reuniones. Para evitar que sus protagonistas trasladen la 'fiesta' a la carretera, con el peligro que ello conlleva para ellos mismos y el resto de conductores, la Dirección de Tráfico del Gobierno Vasco desarrollará desde el próximo lunes y hasta el 6 de enero una campaña de vigilancia y concienciación destinada a prevenir accidentes de circulación causados por el consumo de alcohol y drogas.
Durante este año, ambas sustancias han provocado 468 siniestros en las carreteras de Euskadi, un 6% del total.
Patrullas de la Ertzaintza, así como de las policías municipales de las tres capitales vascas, así como de Irun, Getxo, Basauri y Leioa, realizarán cerca de 10.000 controles durante los cuatro próximas semanas con un único objetivo: «evitar la presencia de conductores en condiciones no óptimas» en el asfalto, tanto en vías principales como en secundarias. Esta opción es utilizada de forma frecuente por los automovilistas para intentar esquivar los dispositivos policiales. Los agentes se apostarán en puntos móviles y realizaran los test de alcohol y estupefacientes todos los días de la semana, «en cualquier franja horaria», aunque reforzarán los controles durante los fines de semana y jornadas festivas, especialmente por las noches.
La campaña del Departamento de Interior forma parte del plan estratégico de seguridad vial de Euskadi 2007-2010, en el que participan el Gobierno Vasco, las tres diputaciones forales, ayuntamientos y otros organismos privados relacionados con el tráfico y las carreteras.
Desde el pasado mes de enero, la Ertzaintza ha realizado 71.918 pruebas de alcoholemia con un porcentaje de resultados positivos del 5,6%. El año pasado tramitó un total de 5.096 denuncias contra automovilistas que conducían ebrios o bajo los efectos de sustancias estupefacientes. La cifra fue ligeramente superior a la de 2007, que se cerró con 4.980 expedientes, a pesar de las continuas campañas de concienciación de las autoridades.
Además, tras la reforma del Código Penal conducir con tasas de alcohol superiores a 1,2 gramos por litro de sangre es delito, que puede ser sancionado con penas de entre tres a seis meses de prisión o una cuantiosa multa. Sin olvidar que el conductor se arriesga a perder hasta seis puntos de su carné.
Campaña mediática
Junto a los 10.000 controles de carretera, la Dirección de Tráfico ha diseñado una campaña de concienciación, protagonizada por personajes de series de humor de ETB. Mediante espacios de radio y televisión, 'El Jonan' y 'El Txori' -de Vaya Semanita- y Patxi -de Wazemank- llamarán la atención de los automovilistas sobre el riesgo de accidente que supone el consumo de bebidas alcohólicas o drogas antes de conducir.
Asimismo, los paneles de señalización variable de las carreteras también ofrecerán consejos.
Fuera de Euskadi, las patrullas de la Guardia Civil también se sumarán a la guerra contra los conductores que van borrachos o drogados. Así, los agentes de tráfico del instituto armado establecerán más de 1.000 puntos de control para realizar 20.000 pruebas diarias de alcoholemia durante dos semanas.
Según la última memoria del Instituto Nacional de Toxicología y Ciencias Forenses, el 31% de los conductores fallecidos el año pasado contaba con un índice de alcohol igual o superior al permitido.
La DGT recordó que el consumo de bebidas alcohólicas puede provocar, entre otros efectos, disminución de la agudeza mental y de la capacidad de juicio, perturbación motriz, euforia, pérdida de control, dificultad de concentración de la vista o disminución notable de la percepción de riesgo, lo que incrementa hasta nueve veces las posibilidades de sufrir un accidente de tráfico.
martes, 15 de diciembre de 2009
Guerra al alcohol y a la droga al volante
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario